Me pude reunir con algunos viejos compañeros, saludar a algunas antiguas profesoras y luego de eso alejarme a un lugar oscuro y silencioso, debido a que había demasiada bulla en donde se concentraba la gente, fue relajante estar en la oscuridad lejos de la gente, por otro lado, el ser llamado para tomarme fotos y eso, si bien no me molestó, tampoco me gusto, que cuando salude como cuando me despedí de las profesoras y psicólogas que hacía tiempo no veía me reclamaban beso, por otro lado, algunos se asombraron enormemente de que yo fuese tan alto ahora, aunque yo creía que seria lo natural considerando que siempre pensé que llegaría a ser alguien muy alto en tamaño.
Me divertí y gustó, el estar ahí pasando el rato, me agradó volverlos a ver, y quizás me divertí algo, aunque estuve la mayor parte del tiempo alejado porque había mucho ruido, bueno me divertí, quizás fue algo nostálgico, no sabría decir, no ha cambiado tanto en el interior de los lugares, pero fue bueno ir a visitarlos un tiempo, le dijeron a mi madre que los visite más seguido.
Mi madre tomo fotos, así que podrán ver las fotos que me tomo.
Adiós
Alejandro
Lala, fue mi última profesora
Jessica, mi primera profesora, dice que tiene
la piedra que un día le regalé
Con mis compañeros
Los mismos y Anita , la psicóloga
Andrés, yo, Maria Alejandra y Valeria
Nelly, la fundadora del colegio
Patty Servat, la directora
Una placa para Nelly